Tonos de Gris Pintados en tonos de gris, carentes de cualquier adorno que distraiga la mirada y atrapando la luz para después distribuirla redirigida con una sola función: dejar ver

Sirenacanta escribe sobre la tortura que puede ser el aseo personal.

Yo lo veo desde un enfoque un poco diferente. El momento que uso para deshacerme de los vellos, lo uso como un ratito para chinearme. Yo soy de esas personas que duran 45 minutos en el baño (por lo menos).

La gente me pregunta: que tanto puedo hacer en el baño durante 45 minutos? Muchos han sugerido variadas respuestas (pervertidos!), pero aqui esta la mía: En esta vida loca, donde todos corren de un lado para otro, y sin darnos cuenta el tiempo se nos va de las manos, durante 45 minutos, solo existo yo.

Durante esos 45 minutos, nadie me dice que hacer. Los puedo utilizar para pensar en mis problemas, buscar soluciones, asearme, rasurarme, podarme (como dice el pulpo), cortarme las uñas, o mi favorita: simplemente dejar que el agua caiga (me imagino que cuando tenga tina, será estar metido en la tina, por ahora soy un limpio que no tiene tina, y por lo tanto se mete en el agua que cae de la ducha).

Es como poder escapar al lado oscuro de la Luna, donde no hay nadie mas que yo. Pero después de esos 45 minutos, tengo que abrir la puerta del baño y volver a la Tierra.

Para mí, nokia la pegó!

Tengo teléfono celular desde 1998, y he pasado por casi todas las marcar disponibles en Costa Rica, y siempre había tenido el mismo problema: Los teléfonos no aguantan!

Para mí, el teléfono ideal debe cumplir con las siguientes características:

• No tener antena externa: A los que tienen una antena por fuera, siempre se les quiebra. Condenado Murphy siempre tiene la razón, y cada vez que el teléfono se cae, caerá sobre la antena.
• Resistencia al maltrato: Al igual que con todas mis otras posesiones, mi teléfono existe para servirme a mí, no al contrario. Por lo tanto, yo no debería estar pendiente de donde lo guardo, a como puedo guardarlo en la bolsa de la jacket, donde est´ solo y protegido, puedo guardarlo en la bolsa del pantalón, con papeles, llaves, monedas y otras cosas que tienen a rallar el plástico o metal.
• Resistencia al elementos externos: Además, para una persona que le gusta andar haciendo loco, cosas como ir a la playa, a la montaña, practicar deportes, un teléfono debe no solo aguantar maltrato, sino tener cierta resistencia a las condiciones climáticas (calor, humedad, polvo, …).
• Pequeño: Con el avance de la tecnología, es simplemente inaceptable tener que andar un bolso solo para poder cargar el teléfono. Mi teléfono tiene que ser lo suficientemente pequeño para poder guardarlo en una bolsa del pantalón y que no se vea un bulto ni que estorbe.
• Tonteritas adicionales: Lo acepto, soy un geek, y estoy orgulloso. Los geeks tenemos una fascinación talvez un poco mas que normal por la tecnología, y queremos todas las herramientas («juguetes»?) tecnologicas vemos, así que entre más tonteritas tenga mi teléfono, como camara, cronómetro, …, mejor!

Casi que me enamoré cuando compré mi teléfono anterior, el nokia 5210 (que por cierto, ahora esta a la venta) no tiene antena externa, es pequeño, la carcasa del telefono es intercambiable, por lo cual si se daña no hay que arreglar el teléfono, solo cambiar la carcasa, que consiste de dos parte, superior e inferior, y se pueden combinar las partes de carcasas de diferente colores, la carcasa tambien ofrece cierta resistencia al agua, e incluye reloj, termómetro, cronómetro, cuenta regresiva, se conecta a la computadora por medio de un puerto infrarojo.

Que más puedo pedir? El nokia 5140. Tiene todas las tonteritas del 5210, pero ademas tiene la pantalla a colores, cámara para fotos y video, brújula, altavoz, radio, medidor de sonidos y un led para usarlo como un foco.

Me hice un tattoo, bueno, otro tattoo. Yo siempre he dicho que quiero tres tattoos, uno en la espalda, uno en el brazo, y otro en la nalga.

El primero, fue uno pequeño en la espalda en forma de dragón. Fue algo pequeño primero que nada porque no me gustan lo tattoos muy grandes, y segundo, porque era el primer tattoo, y cosas como el miedo y la inseguridad jugaron un factor en el tamaño.

El segundo, el cual me hice el viernes en la noche, es un tribal en una franja que envuelve todo el brazo a la altura del tricep. La parte más dolorosa del tattoo, es la parte interior del brazo, donde la piel casi nunca es expuesta y por lo tanto muy MUY sensible.

El tatuador, Memo, aunque resultó ser pura vida, a primera impresión asusta. Es un tipo pequeño, vestido de negro, y da la impresión de que o ha estado tanto tiempo bajo el efecto de la algo que ya es su forma normal de ser, o de verdad está bajo el efecto de algo. No asusta por su apariencia o por su tamaño, sino por pensar que ese es el tipo que va a manejar la aguja.

Todavía mas impresionante fue la música que escucha Memo. Al entrar al lugar, ubicado en el Mall San Pedro, uno ve a dos tipos y una mucha, con piercings, escuchando rock pesado. Sin embargo, mientras Memo se preparaba para hacer el siguiente tattoo, pone un CD de Orishas a todo volumen o música electrónica. Tipo con nota rara, vestido de negro, tatuado, hasta el momento todo bien pero, escuchando Orishas?! (por si acaso, Orishas es un grupo cubano que le dan al rap y al hiphop un toque muy latino).

Al hacerse un tattoo, la piel es penetrada muchas veces por una aguja, por lo cual se hace un grano, y creo que todo el mundo sabe lo que es tener un grano, como pica (de ahí el titulo de esta nota, ya que estoy a punto de volverme loco de las ganas de rascarme), y las ganas que da de arrancárselo, especialmente cuando hay que estarse poniendo crema sobre el tattoo, lo cual implica pasar los dedos por los granitos.

Estoy completamente de acuerdo con quien quiera decir que los seres humanos tenemos que estar locos para dejarnos hacer una herida a propósito (porque al final de cuentas eso es lo que pasa cuando uno se hace un tattoo), pero es genial andar con un buen tattoo.