Por fin me decidí a cambiar mi Palm. Ahora estoy utilizando una Palm Tungsten T5.
Es increible cuanto puede ayudar uno de estos aparatos a un despistado como yo, que no pierde la cabeza por tenerla pegada al cuerpo.
Muchas personas dicen que estos aparatos no son mas que juguetes caros, pero mientras que uno le de uso son de mucha ayuda, el problema es que mucha gente las compra solo para impresionar, y por estar a la moda, y en realidad nunca les da uso, pero con la mía junto con el teléfono puedo revisar el correo electrónico y navegar por internet gracias a la conección por Bluetooth.
Además, sí tienen eso de juguete caro. Con la Tungsten T5 puedo escuchar música, reproducir videos, ver fotos, hasta correr juegos y usarla como un disco duro externo.
Algo que sí extraño de la anterior era el tamaño, ya que la Tungsten T se cerraba haciéndose unos centímetros más pequeña, pero comparado con todas las ventajas de la nueva Palm, se compensa.
La única pereza con el cambio de Palm fue el tener que conseguir las últimas versiones de todos los programas que tenía instalados, pero tiene su lado bueno, ya que casi todos aprovechan la nueva pantalla mas grande.
Ahora lo único que tengo que hacer es sacar un ratito para ir al ICE para que ellos puedan configurar bien mi teléfono para navegar en internet, y al rato empezaré a escribir en mi blog desde mi Palm.