Tonos de Gris Pintados en tonos de gris, carentes de cualquier adorno que distraiga la mirada y atrapando la luz para después distribuirla redirigida con una sola función: dejar ver

Ya me decidí: Voy por la Triumph!

La verdad, las motos pisteras son muy lindas, y siempre he estado enamorado de ellas. Por eso es que estaba decidido por comprar la Ninja ZX-11. Pero analizandolo bien encontré estos puntos en contra:

• PISTERA: No nos engañemos, Costa Rica no tiene pistas. Tiene una que otra calle bonita y el resto es un monton de huecos, tanto para arriba como para abajo.
• Año 94: Ya es una moto con 10 años. Mi regla para comprar carros es que no tenga mas de 10 años, no veo por que tiene que ser diferente para las motos. Por más cuidado que esté, sigue siendo una moto con 10 años, y si algún día quiero desacerme de ella, me va a costar más.
• Posición: La posición que el cuerpo debe asumir en una moto pistera es ideal para la velocidad, pero es cansada para paseos largos. No creo hacer un paseo muy largo en la moto, pero que pasaría si quisiera hacerlo?
• Los negocios que no salen rapido, no sirven: Esto me lo han dicho muchas veces, y yo lo he podido comprobar. Los negocios que he hecho, y que he tenido que trabajarlos mucho, no resultan ser los mejores. Mientras que en los negocios que todo sale perfecto, no me he arrepentido.

Y comparando una con la otra:

• La Triumph, aunque tiene un motor más pequeño (900cc contra 1100cc), en realidad es un motor suficientemente grande.
• La Triumph es tres años más reciente, y solo un poquito más cara.
• La Triumph Spirit, es una mezcla interesante entre una pistera y una moto touring. Sí presenta mas resistencia al aire, pero no es tanta, y la posición de manejo es más cómoda que la Ninja
• Soporte: La gente de Breiman, los que representan Triumph y Aprilia en Costa Rica, da un trato muy personalizado
• La Triumph me la vende un buen amigo, con el cual yo se que todo va a salir bien. Mientras que con la Ninja, a mi parecer había gato encerrado

Así que ya me decidí, y ya hasta pagué, ya no hay marcha atrás.